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No obstante que el gobierno de Enrique Peña Nieto, ha desplazado una fuerza mayor a 5 mil elementos federales, entre ellos la gendarmería, la violencia contra la ciudadanía y el estado de derecho no se rescatan, Guererro sigue siendo tierra de nadie, mientras el mandatario nacional se exhibe en espectáculos mediáticos anunciando golpes de timón que no garantizan nada y se quedan en discursos reciclados de una realidad que no cambiará, por que no existe voluntad para ello.

En está ocasión la Policía Ministerial encontró los cuerpos de 11 jóvenes sobre una brecha de terracería que comunica la cabecera municipal de Chilapa con la población de Ayahualulco, muy cerca de una caseta de vigilancia de la policía preventiva, cuerpos de seguridad comunmente coludidos o parte del crimen organizado que tienen el control de las regiones.

El hallazgo se registró la mañana del jueves 27 de noviembre, aunque la tarde del miércoles hubo por lo menos dos enfrentamientos en el barrio de La Villa, cerca de la preparatoria número 26, de acuerdo a versiones de la población que escuchaba la metralla y prefiería resguardarse en sus domicilios.

Los cuerpos pertenecen a hombres de entre 20 y 25 años, todos presentan disparos de R-15 y AK-47, a los que les rociaron combustible y se les pretendió incinerar sin éxito.

Aunque los enfrentamientos se dieron la tarde del 26, los cuerpos aparecieron hasta la madrugada y tenían cerca un mensaje contra de uno de los grupos del crimen organizado que operan en la zona.

En el rumbo de Santa Catarina, durante un recorrido del Ejercito Mexicano trascendió la detención de un civil con armas de fuego y granadas.

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