Inflación, ¡Asústame Panteón!

José Cruz Pérez Rucobo

 

Hace pocos días el periodista y mejor amigo, Lic. David Andrew, me hizo una pequeña entrevista para la radio local, en Nuevo Casas Grandes, Chihuahua, acerca de la inflación (pérdida del valor adquisitivo de la moneda, merced a aumentos de precios. Hay otros tipos de inflación en los cuales me considero neófito).

 

A pregunta expresa del periodista, ¿es verdad que el aumento de los salarios provoca inflación? Mi respuesta en automático fue, si lo es. Lo que equivale a una verdad de perogrullo (cosa o situación evidente y sabida, por ejemplo, sólo se puede caer, lo que está arriba o de pie), pero, aquí vienen los asegunes.

 

Ese argumento (inflación) es el esgrimido por el gobierno federal y sector patronal, para asustarnos y negarse a incrementar los infames sueldos que se pagan en México. Lo que es una auténtica canallada debido a que hay factores en la producción de bienes y servicios que son más inflacionarios, por ejemplo; el aumento a los precios de los insumos, a las instalaciones, maquinaria, tecnología, impuestos y sobre todo el aumento de los energéticos, luz, gas, GASOLINAS, siendo esta la más inflacionaria.

 

¿No lo sabían economistas al servicio del gobierno? ¿Dónde estudiaron Economía? Vayan inmediatamente a sus universidades de procedencia, a reclamar la estafa de que fueron víctimas. los titularon y no les enseñaron ni mother, que digo yo, que les regresen de inmediato su dinero.

 

Nuevamente el dato, según fuentes oficiales, el salario mínimo ha perdido el 77% del poder adquisitivo en los últimos 30 años, necesito que quede fijo en su entendimiento estimado lector, que eso significa que se gana menos que la cuarta parte de entonces. La ciencia económica no es sencilla, lo saben los gobernantes y se aprovechan de ello.

 

Es menester que explique así sea con manzanas para su cabal comprensión. Para recuperar el poder adquisitivo que se tenía en 1984, el salario mínimo debería rondar los $280.00 diarios, no, los $68.00 que se ganan, más parece una limosna que un sueldo.

 

Entiendo que eso de los porcentajes es difícil de digerir, algún engañabobos podría decir, si se ha perdido un 77%, aumentemos ese mismo porcentaje al salario y asunto arreglado. No es así (y lo saben), se necesita aumentar el sueldo en un 310%, para llegar a la cifra antes mencionada ($280.00), de ese tamaño es el desface o atraco.

 

Los empleadores mexicanos obtienen una plusvalía (exceso de ganancias) exagerada con nuestro trabajo, esto quiere decir que con $68.00 sólo se le pagan 2 horas al trabajador (tiempo socialmente necesario), las 6 horas restantes se las regalamos, les transferimos recursos o como se dice en forma moderna, “les compartimos utilidades”.

 

El tema es bastante explosivo y de no fácil solución, el aumento deberá ser paulatino aunque sostenido. se requieren políticas públicas que; vean por la justa distribución de utilidades, les interese el crecimiento armónico del país, se tenga una visión de estado, se tenga lealtad al país, se posea altura de miras., ¿tiene todo eso el gobierno actual? No lo percibo así, sino todo lo contrario.

 

México es desigual en extremo, donde, “pocos ganan mucho, y muchos ganan poco”, saltan a la palestra algunas figuras políticas, aconsejadas posiblemente por sus enemigos y toman la bandera del lacerante asunto de la pobreza vía bajos sueldos. El Sr. César Horacio Duarte Jáquez, propone un “fabuloso” incremento de $15.00 diarios de aumento ¡que magnánimo!

 

¿Podrán los pobrecitos empresarios chihuahuenses con tan descomunal incremento? Luego el disminuido Miguel Ángel Mancera (jefe de gobierno del D.F) propone $20.00 de aumento, provocando alaridos, desmayos y sofocones en la clase empresarial defeña, ¿quién da más?

 

Ora, que si no le gusta, a’i le va otra.- cómo en las ferias de pueblo. El asunto se está convirtiendo en un galimatías o nudo giordano, ¿qué dice la clase trabajadora, sus líderes sindicales? ¿les interesa el asunto, o sienten que no es de su incumbencia? les sugiero organizarse tal cual lo hacen los profesores y petroleros, los cuales defienden con uñas y dientes a sus agremiados, someten al gobierno-patrón y gozan de “merecidos” salarios-prestaciones-jubilaciones a temprana edad-dobles plazas-años sabáticos-fondo de retiro-vacaciones a llenar.

 

“Cuando el industrial aumenta, eso es un ajuste; cuando el trabajador pide aumento, eso trae inflación”

Anónimo

 

“Algunos dicen que el trabajo duro no ha matado a nadie, pero yo me digo ¿por qué arriesgarse?

Ronald Reagan

 

“Es difícil hacer que un hombre entienda algo, cuando su salario depende de que no lo entienda”

Upton Sinclair

 

Twitter  @JoseCruz777