Argumentos finales en caso de mexicanos acusados de asesinar al Agente fronterizo Brian Terry

diario19.com

 

Abogados defensores de los dos ciudadanos mexicanos presuntos “bajadores” acusados de la muerte del agente de la Patrulla Fronteriza, Brian Terry, presentaron hoy sus argumentos finales en el caso que destapó el controvertido operativo de Rápido y Furioso, mediante el cual se pretendía, por medio de la venta de armas en Arizona, seguir el rastro de éstas hasta dar con las bandas, sin embargo la operación fue un rotundo fracaso pues perdieron el rastro hasta que el agente fronterizo fue muerto con una de ellas.
La defensa no presentó a ningún testigo ante la Corte Federal en Tucson, Arizona, asegurando que los acusados en ningún momento dispararon contra del agente federal y que huyeron del lugar al momento del enfrentamiento.
Por su parte el fiscal del caso Todd Wallace Robinson, dijo al jurado que las pruebas genéticas así como las huellas digitales demuestran la presencia en el lugar de Jesús Leonel Sánchez Meza, también conocido como Lionel Portillo Meza, y de Iván Soto Barraza.
Ambos acusados aceptaron haber formado parte de un grupo de “bajadores”, nombre común con el que se conoce a los maleantes que operan en la frontera mismos que asaltan a grupos de indocumentados como a traficantes de drogas.
De acuerdo a testimonio presentado en corte por uno de los agentes que acompañaba a Terry, los oficiales patrullaban la zona cuando encontraron al grupo de asaltantes.
Les gritaron en español “policía”, pero estos comenzaron a disparar impactando a Terry por la espalda, quien aparentemente no tuvo ninguna posibilidad de accionar su arma, detalla el testimonio.
Por lo menos dos de las armas encontradas en el lugar fueron relacionadas con la operación fallida de Rápido y Furioso, por la cual autoridades estadounidenses permitieron que traficantes mexicanos compraran armas en ciudades en Arizona y las llevaran a México.
La idea era seguir el rastro de las armas y detenerlos, pero ésta fracasó ya que perdieron el rastro de las mismas.
Antes del inicio del juicio, el juez federal en el caso, David Bury, determinó que no permitirá que se mencionara para nada el controvertido operativo “Rápido y Furioso” durante el proceso.
Dos involucrados en el caso, identificados como Manuel Osorio Arellanes y Rosario Rafael Burboa Álvarez, ya fueron sentenciados previamente a 30 años de prisión a cada uno. Otros dos hombres se encuentran fugitivos y se sospecha que se encuentran en México.
Se espera que el jurado comience a deliberar hoy mismo, y en caso de ser encontrados culpables a los dos acusados podrían enfrentar la pena de muerte.