Gobierno mexicano no está haciendo su trabajo: “Las patronas” en España

diario19.com / La jornada

 

Norma Romero lleva 20 años alimentando a los migrantes centroamericanos y mexicanos que viajan en el llamado tren de la muerte o La Bestia, a su paso por su comunidad, Amatlán de los Reyes, enclavada en la selva de Veracruz.

El proyecto creció día a día y hoy es conocido como Las patronas (participan en él varias mujeres de la región), referente internacional en ayuda humanitaria y asistencia al migrante. Romero realiza una visita a España para fortalecer los vínculos con organizaciones de indocumentados en Europa, que últimamente enfrentan los ataques xenófobos de la extrema derecha, pero también para impulsar la candidatura de su organización al premio Princesa de Asturias de Cooperación, que se decidirá el próximo 2 de septiembre y del que es una de las propuestas más fuertes.

Pan y leche para los hambrientos

En entrevista con La Jornada, señala que en estas dos décadas no han encontrado ni apoyo nientendimiento de los gobiernos federal y estatal de que los migrantesson personas que tienen hambre y necesidades básicas, como una mínima atención sanitaria. Su labor, que empezó regalando un trozo de pan y un vaso de leche a jóvenes hambrientos que viajaban empotrados en el tren de la muerte, ahora también consiste en sensibilizar a la población y a todo aquel que quiera escuchar de la grave crisis humana que existe en México.

Empezamos a entender que este es un proyecto que va más allá de nosotros y poco a poco fue creciendo; ahora el comedor original se ha convertido en un albergue donde el migrante puede descansar, curar las heridas y comer. Y de ahí nos empezaron a llamar para concientizar a las personas dando charlas sobre la situación de los indocumentados, quiénes son y por qué salen de sus países. Desgraciadamente, muchos creen que son delincuentes que se van de sus países porque los expulsan, pero no es así: se van por la falta de oportunidades y por la violencia que se ha generado en Centroamérica y México, explicó Romero.

Después de una visita también de trabajo a Londres, la fundadora de Las patronas tiene una agenda muy apretada en España, donde se reunirá con numerosas organizaciones civiles y de defensa de los derechos humanos, así como con diversas formaciones políticas sensibilizadas con la problemática de los derechos humanos en México y que, desde su trinchera, también han apoyado la candidatura al prestigioso galardón. El único pequeño problema que tuvo junto con sus compañeras fue al cruzar la frontera española, donde la policía revisó minuciosamente sus documentos y les reclamó una carta de la embajada de México, que nunca llegó. Aun así pudieron entrar al país y difundir su visión de la migración y la grave situación que se vive en México.

“En todo este tiempo nos ha tocado ver de todo: desde migrantes que mueren en las vías hasta personas mutiladas que no podemos dejar ahí, sino que los llevamos al hospital e intentamos atenderlos, aunque a veces el gobierno intenta cobrarnos el servicio médico a nosotros, cuando pensamos que es su responsabilidad darles una atención humanitaria. Sobre todo cuando en Centroamérica y México los jóvenes se están yendo porque no hay trabajo, no hay becas para que sigan estudiando, no hay deporte, lo que los convierte en presas fáciles para el crimen organizado.

Crimen organizado y bandas

El gobierno mexicano no está haciendo lo que le corresponde. Nosotros, como sociedad civil, nos dimos cuenta de que hay muchas personas a las que les falta comida, y a nuestros gobiernos los invitamos a que se den cuenta de esta realidad y no la sigan ignorando. Además, se han hecho muchas denuncias de agresiones contra indocumentados y defensores de derechos humanos; lamentablemente no entendemos por qué nuestro gobierno no hace nada y no elimina la corrupción que hay por todos lados. Los principales obstáculos que hemos encontrado a nuestra labor han sido de las bandas y del crimen organizado, señala.

Sobre la polémica abierta por la actitud xenófoba de Donald Trump, precandidato del Partido Republicano a la presidencia de Estados Unidos, considera que es una persona que cree que porque tiene dinero puede hacer todo. Desde luego no ha sufrido lo que padece una persona que tiene que luchar para poder levantarse, pues él nació en una cuna de oro; eso no le da derecho a humillar y pisotear al ser humano. No le da derecho a decir que va a sacar a millones de migrantes de Estados Unidos. Una persona que tiene tanta ira hacia las personas no puede ser sana. Está enfermo de racismo y el hecho de no reconocer que los migrantes sostienen a ese país es una grave equivocación.

En cuanto a la posibilidad de recibir el premio Princesa de Asturias, Romero afirma: Así como alguna vez volteamos a ver a los migrantes y entendimos que tenían necesidades y debíamos ayudarlos, sólo el hecho de que hayan volteado a vernos y nos tomaran en cuenta para recibir un premio para nosotros ya es suficiente. No estamos haciendo esta labor para que nos premien. Se gane o se pierda, no vamos a dejar de hacer el trabajo que realizamos todos los días. Lo importante es que sigamos apoyando y no nos perdamos en el camino.